¿Sabes a qué nos referimos con la porosidad del cabello?
La porosidad del cabello se refiere a la capacidad del cabello para absorber y retener la humedad y los productos. Está determinada por la estructura de la cutícula, la capa externa del cabello. La porosidad puede clasificarse en tres niveles:
Porosidad baja: La cutícula está muy cerrada, lo que hace que el cabello sea resistente a la absorción de humedad y productos. Este tipo de cabello puede ser más difícil de hidratar, pero una vez que se hidrata, retiene la humedad por más tiempo.
Para porosidad baja se recomienda hidratación ligera: Elige acondicionadores ligeros y desenredantes que no sean demasiado pesados ni grasosos
Porosidad media: La cutícula está ligeramente abierta, lo que permite una absorción equilibrada de humedad y productos. Este tipo de cabello es generalmente fácil de manejar y mantener.
Para porosidad media se recomienda equilibrar hidratación y proteínas: Usa champú suaves con acondicionadores hidratantes. Realiza tratamientos profundos semanalmente y protege el cabello de factores ambientales.
Porosidad alta: La cutícula está muy abierta o dañada, lo que permite que el cabello absorba rápidamente la humedad y los productos, pero también los pierde con la misma rapidez. Este tipo de cabello tiende a ser más propenso al frizz y al daño.
Para porosidad alta se recomienda hidratación profunda: Utiliza mascarillas y acondicionadores profundos regularmente para mantener la hidratación.
¿Cómo saber la porosidad del cabello?
Introduce un cabello completo ( que contenga la raíz) en un vaso con agua y observa. Mantén el cabello en el agua de 2 a 4 minutos.
-Si tu cabello se ha quedado en la superficie del vaso: indica baja porosidad del cabello.
-Si se ha quedado flotando por la mitad: ¡enhorabuena! La porosidad media es la más recomendable.
-Si se ha hundido casi por completo: tienes porosidad alta